El 2 de junio de 2013, después del oficio divino en el templo de Gran Mártir Pantaleón Acharnon, en Atenas, el Sínodo de la Iglesia Ortodoxa de Ellada ofreció la recepción en honor del Santísimo Patriarca Kirill de Moscú y toda Rusia.

La recepción contó con la presencia de los miembros de la delegación oficial de la Iglesia Ortodoxa Rusa, los jerarcas griegos, el Ministro de Educación, Cultura y Deportes de Grecia Konstantinos Arvanitopulos, los funcionarios estatales y representanes de círculos sociales, los diplomáticos de varios países, el clero de la Iglesia Ortodoxa de Ellada.

Dando bienvenida al Santísimo Patriarca Kirill, Su Beatitud, el Arzobispo Jerónimo agradeció a Su Santidad por el apoyo prestado por la Iglesia Ortodoxa Rusa: “Estamos muy contentos de tener su apoyo, ya que en estos tiempos difíciles aún más debemos apoyar uno a otro. Nuestra Iglesia no sólo se impregna por la palabra y la gracia de Dios, “las palabras de la vida” y las oraciones de los santos de nuestra fe. Sino también se llena de vida gracias a la solidaridad y la complicidad en la lucha y los sentimientos de los otros”.

El Primer Jerarca de la Iglesia Ortodoxa de Ellada hizo mención especial de donaciones recogidas por los creyentes de la Iglesia Ortodoxa Rusa para ayudar a las víctimas de la crisis económica en Grecia. “Eso no sólo nos tocó emocionalmente, – dijo Su Beatitud. – Estos fondos eran utilizados en la organización de los almuerzos de caridad y el apoyo a los servicios sociales en conjunto, lo que ha ayudado a sobrevivir a muchos hermanos nuestros que sufren”.

En su discurso de respuesta el Santísimo Patriarca Kirill, en particular, dijo:

“El plan de Dios para la Iglesia de Cristo se revela en su historia, ya que logró sobrevivir en las persecuciones de los primeros tres siglos, y bajo el yugo de los heterodoxos, como la conquista mongola de Rusia o la conquista otomana de los Balcanes, y bajo la embestida del ateísmo. Ella sobrevive ahora entre los ataques del secularismo agresivo y el relativismo moral.

Los pueblos ortodoxos están constantemente expuestos a las pruebas. Apenas los rusos, ucranianos, bielorrusos, moldavos, kazajos superaron el etapa difícil de la transformación política y económica, los griegos y los chipriotas han entrado en el período de la crisis. Y no sabemos que nos queda por delante. Sólo sabemos una cosa: todas las dificultades nos envía Dios para que expresemos el socorro mútuo, el apoyo y el amor, y en todos los niveles, interpersonal, social y estatal”.

 

Servicio de Comunicación del DREE