El 24 de octubre de 2012, el Ordinario de la Arquidiócesis de la Madre de Dios en Moscú, el Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Rusia, el Arzobispo Paolo Pezzi envió al Santísimo Patriarca Kirill de Moscú y toda Rusia una carta en la cual expresó su posición frente a los ataques a la Iglesia Ortodoxa Rusa.

“A vaces parece que el propio papel de la Iglesia en la sociedad contemporanea quieren poner en duda, como si quisieran expulsarla de la vida de las personas, – escribe el Jerarca católico. –  El Evangelio y la historia mundial nos dicen que a la Iglesia la siempre van a aceptar o rechazar, o amar, o odiar”. Según el Arzobispo Pezzi, la Iglesia Ortodoxa Rusa y el Santísimo Patriarca como su Primado juegan el papel principal en el testimonio constante sobre la fe cristiana en las circunstancias sociales, económicas y culturales de la sociedad rusa, y sólo la fe “está capaz de llevar consuelo, crear nuevas, más estables relaciones en la sociedad”.

“Los cristianos deben enfrentar el mal en el mundo, defender firmemente la justicia social y los valores morales, – continua el Arzobispo Pezzi. – En la unidad con todos quienes valoran la paz, justicia, quienes no son indiferentes al bien social y la dignidad de la imágen de Dios en cada persona, nosotros podrémos alcanzar mucho más que si hubiéramos actuado uno por uno”.

El Presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Rusia expresó al Santísimo Patriarca su compasión por “los insultos que tiene que soportar la Iglesia Ortodoxa Rusa en el último tiempo”. “El consuelo para un alma cristiano en esta situación triste podría ser también la compasión fraternal y el recuerdo de que así “habían persiguido a los profetas”, – destaca en su carta el Jerarca.

En conclusión el Arzobispo Pezzi aseguró al Primado de la Iglesia Rusa en el apoyo oracional de la comunidad católica de Rusia y expresó la disposición de compartir con los hermanos y hermanas ortodoxos las obras para el fortalecimiento de la paz justa y prosperidad”.

 

 

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