Declaración del Comité Consultativo Interconfesional Cristiano sobre la situación en Ucrania

 

Nosotros, representantes de comunidades ortodoxas, católicas y protestantes de Azerbaiyán, Armenia, Bielorrusia, Kazajstán, Kirguistán, Letonia, Lituania, Moldavia, Rusia, Tayikistán, Uzbekistán, Ucrania y Estonia, hemos reunido para expresar una opinión común sobre las cuestiones que preocupan a las personas en nuestros países.

En estos días nuestras oraciones y emociones sentidas acompañan el pueblo ucraniano que está pasando por duras pruebas. Todas nuestras comunidades están orando por los que murieron o sufrieron a causa de la confrontación política y social y por la paz duradera y el entendimiento entre todos los ciudadanos de Ucrania, independientemente de su étnia y creencia religiosa.

Llamamos a todos los que influyen en el futuro de Ucrania a seguir firmemente el principio de la libertad de conciencia y de religión, de la no intervención del Estado y de las fuerzas políticas en asuntos internos de organizaciones religiosas. Recordamos las trágicas consecuencias provocadas por acciones similares en la historia de nuestros países. Los métodos revolucionarios, llamamientos a la violencia, a la discriminación y a la captura de los templos de ningún modo podrían promover ni la unidad entre los cristianos, ni una verdadera colaboración entre organizaciones religiosas y el Estado en nombre de la prosperidad y el bienestar de toda la sociedad.

Llamamos al pueblo de Ucrania a hacer todo lo posible para evitar cualquier provocación, manteniendo en corazón el amor al prójimo, a la dignidad humana y a las creencias religiosas.

Por nuestra parte, expresamos la sincera disposición a promover con oraciones y obras el diálogo fraterno y la paz en la sociedad ucraniana.

 

Servicio de Comunicación de DREE