El 11 de octubre de 2013, en la capital de Rusia se celebró el seminario sobre “Comunidades Religiosas por Justicia y Paz”, al que asistieron representantes de la Iglesia Ortodoxa Rusa, el Consejo Mundial de Iglesias, la Iglesia Evangélica de Alemania, el Consejo Nacional de Iglesias de Corea, representantes de las comunidades protestantes rusas, círculos científicos y culturales e invitados extranjeros.

La reunión se realizó en el marco del proyecto “Tren de la Paz”: más de un centenar de representantes de las iglesias cristianas de diferentes países van en el tren por la ruta: Berlín – Moscú – Irkutsk – Pekín – Busan (Corea del Sur), donde en octubre del presente año se llevará a cabo la Décima Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias, dedicada al tema “Dios de la vida, guíanos a la justicia y a la paz”.

El Presidente del Departamento de Relaciones Exteriores Eclesiásticas del Patriarcado de Moscú, el Metropolitano Hilarión de Volokolamsk dio la bienvenida a los participantes del seminario. El jerarca recordó que en las “Bases del Concepto Social de la Iglesia Ortodoxa Rusa” la Iglesia insiste en la distribución equitativa de los frutos del trabajo, teniendo en cuenta el tema de la justicia en los procesos socio- políticos. “Continuando en la tierra el servicio de Cristo, Quien se identificó con los desdichados, la Iglesia siempre ha abogado por los sin voz y los sin poder. Por eso ella hace llamamiento a la sociedad a la equitativa distribución de los frutos del trabajo, en la que los ricos ayudan a los pobres, los sanos ayudan a los enfermos, los que están capaces para el trabajo ayudan a los ancianos”.

El Presidente del Departamento de Relaciones Exteriores Eclesiásticas expresó la esperanza de que la próxima Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias “dedique especial atención al problema de la discriminación de los cristianos y se declare claramente a favor de los perseguidos y enjuiciados”. Según la opinión del Metropolitano Hilarión, especial consideración requiere la situación en Siria, donde tan llamada primavera árabe amenaza con la casi completa destrucción de la población cristiana. “Creo que el Consejo Mundial de Iglesias debe apoyar los esfuerzos de la comunidad internacional para encontrar una solución pacífica del conflicto sirio”, – dijo el jerarca. Su Eminencia Reverendísima bendijo a los participantes del proyecto “Tren de la Paz”.

Luego intervino el Secretario General del Consejo Nacional de Iglesias de Corea, Kim Yong Joo. Él señaló con pésame la continua desconfianza entre los habitantes de Corea del Norte y Corea del Sur, a pesar de tener una tregua. “En la próxima Asamblea del CMI volveremos a hacer llamamientos a la unificación de Corea”, – dijo el Secretario del Consejo Nacional de Iglesias. También él llamó a la Iglesia Ortodoxa Rusa a la coparticipación en este proceso, teniendo en cuenta el fortalecimiento de las relaciones entre la Iglesia Rusa y las iglesias de Corea.

Sus discursos presentaron también el Director del programa del CMI “Cuidado de la creación y la justicia ambiental”, Dr. Guillermo Kerber, el Director de Asuntos Internacionales del CMI, Dr. Mathews George, el Profesor de la Universidad Nacional de Seúl, So Bo Hyuk, el Director del Centro de Estudios Coreanos del Instituto del Lejano Oriente, A.Z. Zhebin, el Obispo Rolf Koppe (Iglesia Evangélica de Alemania).

El proyecto del “Tren de la Paz” fue iniciado por el Consejo Nacional de Iglesias de Corea en la víspera de la Décima Asamblea del Consejo Mundial de Iglesias. El seminario sobre “Comunidades Religiosas por Justicia y Paz” fue organizado por el Departamento de Relaciones Exteriores Eclesiásticas del Patriarcado de Moscú.

 

 Servicio de Comunicación del DREE