Presidente de Rusia V.V.Putin rindió homenaje a los santuarios en Jerusalén y Belén
En la noche del 25 al 26 de junio de 2012, encontrándose en visita de trabajo en Israel, el Presidente de la Federación de Rusia V.V.Putin visitó el Templo del Sepulcro del Cristo. A la entrada del templo al Jefe del Estado ruso le recibió el Beatísimo Patriarca de la Santa Ciudad de Jerusalén y toda Palestina Teófilo III con los miembros de la hermandad del Templo. También entre los asistentes estuvieron el jefe de la Dirección del Patriarcado de Moscú para las misiones en el exterior el arzobispo Egorievsky Marco, el jefe de la Misión espiritual rusa en Jerusalén el archimandrita Isidor(Minaev), su suplente el abad Teofán(Lukianov); el secretario de la Misión el hieromonje Antonio(Gutnik).
Al entrar al templo V.V.Putin se arrodilló ante la piedra de unción. En este lugar el Santo José con Nikodim depositaron el Cuerpo muerto de Jesús al descenderlo de la Cruz, lo untaron con sustancias aromáticas y lo envolvieron con el Santo Sudario.
Después al presidente le acompañaron a “kuvuklia” – la capilla construida en el lugar del entierro de tres días del Salvador.
Más tarde, el Jefe del Estado ruso subió a la Gólgota – el lugar de la crucificación del Señor y Salvador Jesús Cristo, y después bajó a la cueva, donde en el año 326, la santa tsarina Elena encontró la Vivificante Cruz del Cristo.
V.V.Putin le regaló al Beatísimo Patriarca Teófilo un ícono del Salvador.
El Presidente de Rusia también visitó otros lugares sagrados de la Santa Ciudad de Jerusalén.
Por la mañana del 26 de junio, V.V.Putin estuvo en el templo del Nacimiento del Cristo en Belén – la basílica bizantina con antíguos mosáicos del siglo IV, que se levanta sobre la cueva donde nació Jesús Cristo.
En el templo, al Jefe del Estado ruso le saludó el arzobispo de Jordania Teofilakto(el Patriarcado de Jerusalén), quien le contó al presidente la historia de la basílica. Asistieron también en el templo el arzobispo Egorievsky Marco, los representantes de la Misión espiritual rusa.
Después a V.V.Putin se le ofreció un obsequio memorable – una réplica de la estrella de Belén hecha por los artesanos palestinos.
El Presidente encendió una vela en el lugar del nacimiento del Cristo.